- ¿Te gusta la imagen que ves en el espejo?
- La imagen del espejo y nuestra percepción
- La perspectiva en el espejo y en otras situaciones
- Trastornos psicológicos relacionados con los espejos
¿Cómo me ven los demás? ¿Cómo me veo yo en el espejo? Nuestra imagen suele parecernos muy diferente en el espejo que cuando la vemos en una fotografía. Normalmente nos gustamos más en el espejo, pero ¿a qué se debe? ¿Tienes buena relación con los espejos? La cuestión de la percepción de nuestra imagen en los espejos ha sido estudiada ampliamente desde la psicología.
¿Te gusta la imagen que ves en el espejo?
Normalmente nos vemos en el espejo todos los días, incluso varias veces, por eso estamos muy familiarizados con esa imagen. Lo que nos resulta conocido nos suele parecer más atractivo. Pero, ¿te has preguntado si la imagen del espejo es la auténtica? ¿Ves en el espejo lo que ven los demás?
El espejo refleja nuestro rostro con los rasgos invertidos, en una simetría opuesta a aquella por la que nos reconoce todo el mundo y que es la que queda reflejada en las fotografías. Todas las fotos nos muestran nuestra cara al revés de como estamos acostumbrados a verla cada día. Nuestros rostros no son totalmente simétricos, así que la auto-percepción en el espejo no es la misma que en las fotografías, ni igual a como nos perciben los demás. Hablamos de los espejos de siempre, claro está, porque ya existe un invento español que muestra un reflejo no invertido.
La imagen del espejo y nuestra percepción
En un experimento realizado en 1977 en EEUU, unos psicólogos fotografiaron a una muestra de participantes para crear una imagen normal y una imagen invertida de cada uno. Después, estas imágenes se mostraban a esos mismos participantes y a sus amigos. Se les pedía que eligiesen la fotografía preferían. La mayoría de los participantes elegían la imagen invertida, pues era con la que estaban familiarizados mediante los espejos tradicionales. Sin embargo, sus amigos elegían la imagen normal, que era la que a ellos les era familiar.
La perspectiva de la imagen en el espejo
Además la perspectiva también es distinta. Cuando nos miramos en un espejo solemos hacerlo de cerca y siempre suele ser desde la altura de nuestros ojos. Pero el resto de las personas nos suele percibir desde otra perspectiva. La distancia suele ser mayor y la altura a la que están sus ojos no suele coincidir exactamente con los nuestros.
Otro aspecto a tener en cuenta es que no ponemos los mismos gestos cuando estamos a solas con un espejo, cuando posamos ante una cámara o cuando interaccionamos con los demás. En estas dos últimas situaciones no recibimos el feedback instantáneo que nos va dando el espejo.
Trastornos psicológicos y su relación con los espejos
En general, nos solemos sentir cómodos con nuestra imagen en un espejo, aunque haya cosas que no nos gusten, pero hay algunos trastornos que tienen una mala relación con ellos.
Catoptrofobia
Se caracteriza por un miedo desmesurado a mirarse en los espejos. Genera mucha ansiedad (como otras fobias) y quien los sufre evita los espejos y lugares donde los haya.
Anorexia nerviosa
Cuando una persona con anorexia se mira a un espejo se produce una distorsión de la percepción de su imagen. Se ven más gordas, con lo cual, o los evitan (para evitar la ansiedad que les produce ver esa imagen) o se miran de manera compulsiva para comprobar si están adelgazando. Su relación con el espejo es una mezcla de atracción y repulsión.
Curiosamente, la imagen que ven en las fotografías suele estar menos distorsionada. Se pueden ver delgadas e incluso muy delgadas, por lo que los psicólogos suelen utilizar las fotografías como pruebas de realidad (una técnica para tratar la anorexia) con sus pacientes.
Bulimia nerviosa
Las personas con bulimia suelen tener menor distorsión perceptiva con respecto a la imagen que en el espejo ven reflejada, pero también les provoca ansiedad.
Investigadoras de la Universidad de Granada han demostrado que dos técnicas psicológicas basadas en la exposición al propio cuerpo en el espejo ayuda a reducir la insatisfacción corporal y los síntomas asociados en mujeres con bulimia nerviosa. Se utilizaron dos técnicas distintas. La exposición guiada, donde las participantes deben permanecer observando su cuerpo en el espejo mientras lo describen de manera neutral y objetiva. En la exposición pura, en la que las participantes expresan los sentimientos que les provoca mientras se observan.
Trastorno dismórfico corporal
La dismorfofobia es un trastorno de la imagen corporal, caracterizado por una excesiva preocupación por un defecto en el cuerpo, completamente imaginario o muy irrelevante. Las personas con este trastorno se suelen mirar compulsivamente a los espejos, observando sus “defectos”. Suelen recurrir a la cirugía, a ocultarlos a los demás e incluso aislarse socialmente. A este trastorno también se le llama conoce como “síndrome del espejo”.
Despersonalización
En este trastorno se experimenta una sensación de estar desconectado o separado del propio cuerpo y de los pensamientos. Existe una percepción de extrañeza hacia uno mismo. Si quieres sentir algo parecido una despersonalización, párate delante de un espejo y di tu nombre varias veces mientras te miras. Una sensación inquietante.
En conclusión, la percepción de nuestra imagen y las emociones asociadas tienen más que ver con la mente que con la realidad. Desde Masvital Psicología te recomendamos que no creas todo lo que ves.
Si crees que necesitas ayuda, contacta con nuestro servicio de psicólogos online y da el primer paso para volver a sentirte bien.